EL FINAL DE LALOLA

Lalola marcó 8,4 puntos en su último capítulo.

Hay ficciones que marcan un antes y un después. Esas que escriben una página en la historia de la ficción, dejan precedente y hacen todo menos pasar desapercibidas. Entre los últimos ejemplos podemos encontrar a Resistiré, Los Roldán, Montecristo y Son de Fierro, que cada uno a su manera, logró que los productores que le siguieron, tengan otras cosas en cuenta a la hora de armar nuevos productos. En el caso de Resistiré, se convirtió en la primera tira con contenido erótico casi explícito; Los Roldán causó polémica tras incluir un travesti en una tira familiar; Montecristo supo fusionar una historia de amor con la parte más trágica de la historia Argentina reciente; y Son de Fierro demostró que no necesariamente la parejita feliz del comienzo, tiene que llegar así hasta el final, y puso sobre la mesa familiar temas que hasta el momento no aparecían en programas para toda la familia, tal como el consumo de droga adolescente, ceguera que no cesaba en los últimos capítulos, y logró presentar una historia de infidelidad en la que no había ni malos ni buenos. Cada uno de estos productos de destacó por cosas diferentes, y para hacerlo, no siempre fue necesario el rating: Resistiré, fue recién en los últimos meses que logró liderar su franja (antes ganaba Soy Gitano, que fue simplemente una novela más), y Son de Fierro tuvo en peligro su continuidad, antes que pudieran darle el giro de tuerca necesario a la historia.

Con Lalola ocurrió exactamente lo mismo. La tira producida por Dori Media, se promocionaba para Junio del 2007; sin embargo, el debut fue postergado cada vez más hasta estrenar tímidamente un 28 de Agosto, cuando sorprendió a todos alcanzando 10 puntos de rating y superándose al día siguiente. Con el correr de las semanas, la repercusión de la producción de Underground mejoraba, y se demostraba con esto, que los televidentes estaban pidiendo a gritos más ficción en una tv plagada de Gran Hermano y Showmatch.

La aparición de Lalola sirvió para despertar a los productores que se pusieron en marcha para armar ficciones con superproducciones y grandes elencos, los puntos de los que Lalola adolecía. La tira protagonizada por Carla Peterson no necesitaba tener muchos exteriores, ni protagonistas como Arana, Oreiro, Echarri, o Duplaá, sino que con una pareja que nunca había protagonizado un ciclo televisivo, tal como la dupla Peterson-Castro, y un elenco que en su mayoría estaba desaparecido, y el resto no tenía muchos éxitos en su haber, pudieron con una historia fresca y original en el género (en el cine ya había existido), obtener su espacio propio.

Al aparecer la competencia, Lalola comenzó a perder público, pero en ese momento ya no importaba, porque gracias a la repercusión, se convirtió en un fenómeno mundial siendo uno de los programas argentinos con mejor recibimiento en el exterior, logrando ser vendida a 25 países en menos de 6 meses.

Asimismo, aterrizaba en Uruguay, con la incertidumbre de cómo recibiría un público tan conservador como el uruguayo, una historia en la cual un hombre debe abandonar los prejuicios para convertirse en mujer. Sorprendentemente la tira de América arrasó, relegando a Son de Fierro en sus últimos capítulos, a un cómodo segundo lugar. Con el correr de las semanas, a pesar que ni siquiera los del mismo canal sabían si el título del programa era "La Lola" o "Lalola", se afianzó hasta conseguir 10 horas semanales en la pantalla del 12 manteniendo siempre la punta del podio. En este lado del charco, se estima que Lalola termine sobre los últimos días de Junio.

Con los últimos capítulos en Argentina, la expectativa aumentó tanto como el rating, y finalmente en el último capítulo, los televidentes que siguieron la historia, se enteraron si Lalo quedó convertido en Lola, o recibió su antiguo cuerpo. En el final, la emisión logró 8,4 puntos de rating, ganándole a Canal 9, y quedando sólo 5 puntos por abajo de Telefé.

Quizá el rating no haya sido la prioridad, el objetivo en este caso fue el mercado internacional, y obtuvieron el mismo resultado que se consigue sólo con productos protagonizados por grandes estrellas argentinas. El mérito no termina en ahí, sino que además de la lata, Lalola logró también vender el formato a distintos países, para que puedan producir su propia versión local, Sony Entertainment incluido. Se terminó Lalola, el producto que fue revelación en 2007, alcanzó la mayor cantidad de Premios Clarín (ver), se consolidó en el exterior, dejó lucir un elenco que encontró los mejores papeles de su vida (con un Luis Ziembrowsky en una actuación memorable), y sobretodo, se destacó por tocar temas tabú, con simpatía y dinámica, pocas veces vista en tv.

EL FINAL: