LA REINA DEL REMO

Decepcionante debut de Localidades Agotadas.

A ver... por dónde empezar?... Se los digo así: invite a 20 amigos a su casa, pónganse un poco en pedo, y después bajen al sótano (si están todas las lamparitas quemadas, mucho mejor) a jugar a Bailando por un Sueño, los amargos que no quieran bailar, que hagan de jurado, y la veterana que esté más buena que dirija la batuta hasta que el declive no tenga retorno... Eso es aproximadamente el resumen del intento de programa que puso al aire (no sé si fue por error) Canal 10 el sábado pasado.

Arrancando por el título, ya podemos darnos cuenta que no hay mucha inteligencia detrás de este proyecto. Para los que no saben, "Localidades Agotadas" es un cartelito que uno puede encontrar en un teatro previo a darse vuelta e irse a buscar otra cosa, acongojado por no haber podido ver lo que uno quería... Sería en realidad, una alegoría de lo ocurrido el sábado pasado, cuando el público al ver "Localidades Agotadas" también dio la espalda y fue en búsqueda de otra propuesta, sea Zapping o TVR. Hablando del rating, recordemos que los turros del 4 previendo este estreno, programaron semanas atrás Talento Argentino para que se instale en ese horario, una jugada de muy mala leche...

Volviendo al chou de Saeta, nos encontramos con el problema del estudio... Es un teatro. En Uruguay apenas se pueden hacer programas en estudios de tv, y ellos lo van a hacer a un teatro... Es cierto que al hacerlo ahí se puede interpretar que la competencia adquiere más categoría, pero si no lo saben hacer, no lo hagan. Hacer un ciclo televisivo desde un teatro es muy difícil, no sólo acá sino cada vez que se intenta, podemos recordar los problemas del programa Esta noche invito yo o High school Musical el año pasado, que si bien era desde un microestado, los inconvenientes eran los mismos. Y fue así como los muy serios y graves problemas de audio, iluminación y cámaras, desfilaron a lo largo de todo el estreno, invitando al televidente a huir espantado del 10.

Lo que sí vamos a reivindicar desde este humilde blog, es a la pobre Reina Reech, quien demostró ser una remadora de raza en ese programa que estaba más cerca de ser una quermés que de un concurso de baile. La pobre Reina era la única que le metía onda, llegando hasta gritar para que el teatro no parezca un cementerio. La jurado de Patinando por un Sueño demostró estar varios escalones por encima del programa, por lo que no se logró terminar de entender cómo es que llegó a estar conduciéndolo. Lo que no me quiero imaginar son todas las puteadas que debe haber pegado la Reech cuando no estaban al aire... Si esto sigue así dudo muchísimo que ella siga viniendo para que le tomen el pelo de esa manera con tantos errores garrafales desde la producción, y se los digo hoy: se va a terminar yendo y la van a tener que poner a Noelia Campo...

Para colmo le pusieron al lado a Fablet, que estaba desubicado como moco en la oreja, perdiendo el (poco) respeto ganado en aquel medio año de Zona Urbana. Nada en contra Fablet, pero fue un desastre, cada vez que hablaba miraba a la conductora en vez de la cámara, y sólo sirvió para poner todavía más nerviosa a nuestra ahora amiga Reech. Sabrán ustedes que Petinatti no es santo de nuestra devoción, pero estoy convencido que si hubieran puesto algún peso más para que él sea el conductor junto a la porteña, el programa hubiera salido airoso.

La desorganización a lo largo de toda la emisión fue imperdonable, lo que hacía que en algún momento el programa se pareciera más a una parodia del viejo Videomatch que a un concurso de comedias musicales. Una de las tantas desprolijidades, era que nadie tenía ni celular con calculadora en el estudio, lo que llevó al pase de comedia más desopilante de la noche porque quien tenía que sumar los puntajes del jurado en vivo era Fablet, quien además se quejaba al aire de tener que sumarlos, a lo que Reina Reech (que se lo quería comer crudo) decía "Que atrevido este Martín, quiere que todo el jurado califique igual para sumar más fácil...". Yo me pregunto, ¿no hubo un ensayo general de esto para evitar este tipo de errores?...

Los participantes tuvieron un nivel "hasta ahí nomás", no fue una cosa deslumbrante como algunos esperaban ver ya que "estaban buscando 30 participantes pero como el nivel del casting era tan bueno lo extendieron a 35"... Aunque de algún modo, el nivel de los concursantes era proporcional al del jurado, que está integrado por el Dr. Evil de Austin Powers, un personaje sumamente pintoresco (hablo del jurado), que tenía una expresión de sorpresa constante dibujada en su cara, pero que lamentablemente será una megaestrella del teatro oriental, pero en tv no se conoce ni a sí mismo, encima se puso muy caliente el tipo cuando Reina Reech le sacó la remera a un participantes y este jurado exigía que todos los participantes hicieran lo mismo... El excelentísimo jurado lo conforma también Verónica "me anoto hasta para el bingo" Lavalle, la experta de Playa Bar Tv... ¿Qué se puede decir sobre esto? Encima ella misma blanqueó de una que no tiene la menor idea sobre nada: "Yo no se sobre canto ni baile, mis compañeros van a evaluar eso, yo voy a hablar como público y decir cómo me llegó a mí...". Hay cosas que a uno lo terminan superando, ¿No se supone que el público después tiene la oportunidad de votar vía sms quién quiere que se quede? ¿Entonces para qué joraca se precisa esa profesional de la nada puntuando en representación del público cual Evita Perón? En Patinando por un Sueño, tampoco nadie sabe nada de patín (excepto Reina que es coreógrafa y tiene autoridad para evaluarlo), pero son periodistas de espectáculos que de algún modo califican el espectáculo que se ofrece, mientras Florencia de la V de alguna forma se explica por ser una persona con experiencia en el medio... ¿pero cómo hacés para justificar la presencia de una astróloga en un jurado de baile y canto? Para cerrar el triunvirato metieron a Humberto "hasta en la sopa" De Vargas, para remarcar que era un producto de Canal 10... El que estaba desubicado ahí era el desamparado Julio Frade, por ser el único capacitado para evaluar las actuaciones.

También quedó un tanto confuso el sistema de puntuación y sentencia, había que estar muy pendiente del programa para entenderlo. Aparte, al actuar cinco participantes a la vez y luego ser calificados de a uno, generaba que al momento de ser evaluados, el televidente no se acuerde de cómo fue la actuación en forma individual y no tenga un juicio para cada participante, por lo que la evaluación del jurado no lograba producir interés. Además, dos grupos interpretaron innecesariamente la misma canción, triste... Otro detalle que ensució la noche fue que justamente siendo un programa de comedias musicales, la musicalización dejaba mucho que desear, turnándose siempre entre Candyman y un tema de High School Musical.

Sin entrar a criticar la escenografía, ni el fantasmagórico centro SEDAL (porque con algo había que pagar la participación de Reech...), concluyo el informe manifestando que la mediocridad criolla copó la pantalla en este sucio debut. En lo que respecta a televisión en Uruguay se suele pensar que alcanza con hacerlo, pero no es así sino que además hay que hacerlo bien. Un informe de este blog la semana pasada daba a entender que le tenía fe a este programa... Una lástima.