El año terminó con varios que celebraron un balance muy favorable del 2011 y otros que no tanto...
BUENOS 2011:
Bendita Tv: El ciclo de archivo arrancó su ciclo 2011 en vivo y con tribuna, demostrando que se mantiene más vigente que nunca. Se consolidó en su sexta temporada como un producto imbatible, siendo de los pocos que no necesita ganar su franja horaria o alcanzar una cifra extraordinaria de rating para seguir siendo un éxito arrollador. Este año enfrentó un desafío no muy sencillo de resolver: la convivencia con un programa de archivo que emitía prácticamente el mismo material dos días antes y en horario central. La creatividad de Bendita Tv pudo mucho más que eso y salió airoso, imprimiendo de una identidad irrepetible a cada tape que ponía al aire. Además, fue elegido por el jurado de los Iris como mejor programa de humor, y por los lectores de Telemedios como mejor programa del año.
Sonríe: Es muy difícil llegar a la televisión con un género estrictamente monopolizado por un mismo programa sin ser tildado de copia. Sin lugar a dudas ese era el obstáculo más difícil que se le presentaba a Sonríe: te estamos grabando y supo sortearlo sin ningún inconveniente. Encontró la manera de proponer un producto alternativo a Bendita Tv y el resultado fue más que auspicioso. Quizás sin alcanzar la misma repercusión, aprobación, o efectividad que el ciclo de Canal 10, Sonríe se convirtió en uno de los programas de producción nacional más vistos del año. Además, consolidó a Manuela Da Silveira y Cecilia Bonino como excelentes conductoras más allá del rol humorístico o periodístico en el que acostumbrábamos a verlas respectivamente.
Algo Contigo: Carballo arrancó el año con dos tragos amargos: El deslucido final de Pizza a Carballo y el fugaz y frustrado ciclo en el que repasaba lo más “trascendente” de Gran Hermano 2011 junto a Evangelina Ortiz. Sin embargo, él sabía que Monte Carlo le tenía guardada otra oportunidad al frente de un programa diario. Algo Contigo arrancó midiendo cifras miserables, pero los buenos reflejos de la producción, y la ductilidad de Carballo al frente de la conducción, le permitieron dar un giro de timón a tiempo y lograr un batacazo. En cuestión de días, Algo Contigo pasó de ser un magazine tradicional al primer programa de espectáculos diario de la televisión nacional, y la modificación fue gol. Con el tiempo, Algo Contigo se convirtió en un imbatible de la tarde y el gran rival a vencer por la competencia.
Teledoce: Por sexto año consecutivo ganó cómodamente el rating anual. Mientras Monte Carlo y Saeta se sacaron chispas a lo largo de todo el 2011 por el segundo lugar, el 12 pudo mirar esa pelea desde un pedestal, y a la vez que los otros dos canales acomodaban su grilla con bruscos cambios permanentes para arañar un punto más, el canal comandado por Restano presentó el mismo esquema que desarrolla hace años, y navegando por la ruta que se propusieron desde un comienzo, llegaron al puerto de la victoria. Además, el canal finalmente le dio aire a Adicciones, la primera ficción de Contenidos TV que se llevó todos los aplausos del año en materia de calidad y demostró que se puede hacer ficción de primer nivel en nuestro país. Siguiendo con la línea de producción nacional, Teledoce también tuvo aciertos con Día Perfecto, La Receta Perfecta, Cámara Testigo o Minuto para Ganar que alcanzaron muy buenos números.
Karina y Gaspar: La flamante pareja televisiva abrió el año con la noticia de su pase a las huestes de Canal 10. El resultado fue más que auspicioso: Prueba que me Amas fue uno de los grandes éxitos del canal, con un formato innovador que presentó importantes recursos a nivel de producción. Además, dejando atrás el triste desenlace con el que se despidieron de Monte Carlo, Gaspar y Karina no solo se pusieron al hombro un programa juntos, que rindió y sorprendió, sino que se sacaron las ganas de tener emprendimientos por separado. Gaspar lució su faceta actoral en Porque te quiero así, y Karina se desempeñó como conductora infantil en Jungla Mágica. Además de las buenas noticias en lo que refiere a lo laboral, este año finalmente contrajeron matrimonio, y cerraron el 2011 con la llegada de Alina, su segunda hija.MALOS 2011:
Omar Gutiérrez: El conductor de Hola Vecinos no tuvo un buen año. A los percances de salud, se le sumó el bajo rendimiento del ciclo en comparación al año anterior. Además, el magazine sumó a dos grandes referentes del humor como Petru Valensky y Rafa Cotelo pero nunca lograron encontrar un lugar para lucirse en el programa.
Verónica D’Andrea: Hace años existía en las tardes de los sábados en Monte Carlo, un programa que mostraba los trailers de los próximos estrenos en cine, y las entrevistas a las figuras más destacadas del Río de la Plata al mejor estilo E! criollo. Los años fueron pasando y mudaron al programa de Verónica D’Andrea a la mañana, y luego a la media noche en un ciclo que es apenas una mala imitación de aquel producto tan prolijo de años atrás: Verónica Show. Éste se emite casi a las tres de la mañana y sirve para poco más que para que Vero pase sus chivos de sus tiendas de ropa, porque el contenido se limita a mostrar videos de youtube de manera azarosa, y muchas veces sin siquiera tener la delicadeza de citar la fuente.
Esta Boca es Mía: Si bien continúa siendo un ciclo de gran conducción y producción, y por lejos la puesta más importante de la tarde en producción nacional, al programa de Victoria Rodríguez le llego en esta temporada el lógico desgaste de un ciclo diario que no paró nunca desde su estreno tres años atrás. Los temas se fueron repitiendo, los panelistas agotando, y los debates perdiendo interés. La fuerte competencia que tuvo este año no favoreció al programa de Victoria, y el triste episodio con las declaraciones de Julio Toyos y la respuesta de Vic empañaron esta temporada de Esta Boca es Mía.
Con un caño: El Rusito González, Pacella y Mauricio Suárez asumieron este año el dificilísimo desafío de ponerse al frente de un ciclo humorístico de media noche. Ocuparon el lugar que el año pasado defendían Gaspar Valverde y Karina Vignola con Terapia de Pareja, pero la audiencia no acompañó, las críticas en las redes sociales fueron lapidarias, y si bien los tres humoristas pudieron lucirse con sus comentarios ácidos y personajes ocurrentes, el programa duró lo que un suspiro, sin tener siquiera la oportunidad de despedirse de sus televidentes.
Canal 5: Tuvo otro año para el olvido. El conflicto gremial llevó a realizar cortes de cinco minutos de duración en la programación del canal permanentemente, y aún así, las placas que anuncian ese corte son lo más interesante que presenta el canal oficial en su programación. Las propuestas siguen sin convencer al público, a la crítica, a los auspiciantes, ni a nadie.
