ENTREVISTA EXCLUSIVA: LUIS ALBERTO CARBALLO Y EVANGELINA ORTIZ SOBRE GH 2011

Luis Alberto Carballo y Evangelina Ortiz, los flamantes conductores del resumen uruguayo de Gran Hermano 2011, nos cedieron amablemente una entrevista minutos antes de salir al aire para contarnos cómo se vive esta esperiencia, su opinión sobre el reality, y reflexionar sobre la idiosincrasia uruguaya...

"Gran Hermano roza lo sádico y lo bizarro"

- ¿Cómo viven la experiencia de conducir el resumen de Gran Hermano?

L: Bien… Es como un programa de chimentos pero de un lugar sólo… Por algo dicen que Gran Hermano es el padre de todos los realities. Está bueno, más allá que alguna gente diga que está preparado o no, está bueno, te divertís… Es como una telenovela pero real.

E: La experiencia es muy divertida, Estoy acompañada por un gran conductor y un muy buen compañero que me guía, me ayuda, me enseña; porque es la primera vez que trabajo haciendo televisión en vivo. Tengo un buen apoyo de Luis que hizo vivo toda su vida y estoy muy contenta.

- ¿Eran seguidores del ciclo desde antes?

L: Sí, hubo uno que no lo vi, pero había otros que era impresionante, lo miraban en casa todos los días. Yo llegaba a casa y de repente mi madre me decía ‘¿Viste lo que le pasó a Santiago?' Y hablaban de Santiago como si fuera el primo… Y era uno de Gran Hermano.

E: Yo seguí todos los Gran Hermano, menos el de famosos que no tuvo mucha repercusión. Me entretiene mucho el reality y me gusta, y cuando me convocaron para éste estaba contenta porque es una experiencia linda en un formato conocido.

- ¿Participarías del reality?

E: Personalmente no… Me gusta mucho la televisión, pero no me expondría las veinticuatro horas del día a estar frente a una cámara… Si me dicen entrás por diez días entraría, pero por tres meses ya no…

- ¿Cuál sienten que es la historia más atractiva de esta edición?

E: La verdad que la historia de Alejandro (el participante con disforia de género) es fuerte, porque no hay muchos casos. Él tuvo mucho valor en ir a contarlo,porque por ahí le tendría que dar vergüenza, pero tuvo valor y lo contó, y está pidiendo ayuda para poder operarse.

L: Yo hasta el momento no sé… Hay gente que me dice ‘gana Alejandro’… Pero yo no estoy tan seguro de que gane Alejandro. Hay que ver. Si te lo comparo con el otro reality… Ganó el que bailaba menos. Hay que ver cómo lo toma la sociedad argentina… Yo creo que en algún momento se va a poder votar desde acá en Gran Hermano pero ellos igual son más… La sociedad marca mucho eso, y capáz que les cae mal, o lo contrario… Yo no digo que no vaya a ganar, pero sí digo que no estén tan seguros de que vaya a ser el ganador.

- ¿Ven a algún otro con perfil de ganador?

E: Todavía no me doy cuenta hacia dónde se dirije el perfil de cada uno. A mí me gusta Alejandro, por todo lo que está pasando dan ganas de ayudarlo…

L: No. Por ahora no. Ya a fines de enero la gente lo va a tener más claro, pero puede haber movidas… En el otro Gran Hermano Marianela, la santita gordita, mató al que era ganador seguro: Diego, que después lo hicieron entrar a Gran Hermano Famosos y ganó. Puede pasar cualquier cosa.

- Teniendo en cuenta que es un programa de Gran Hermano pero transmitido desde acá, ¿cuánta libertad tienen para decir algo que no les guste del reality en sí?

E: Yo creo que acá tenemos toda la libertad del mundo… Tampoco podemos ponernos a hablar mal de Gran Hermano porque no tendría razón de estar acá si no nos gusta el formato, sería contradictorio. Si estamos acá es porque a los dos nos gusta el formato, nos divierte y si llegara a haber algo que no nos gusta, por ahí lo decimos al aire, tenemos total libertad de la producción, del canal, y entre nosotros para decir lo que sentimos.

L: No tenemos límites, pero tiene que primar el sentido común… Vos ves la escenografía, las imágenes, los derechos… Nosotros somos Gran Hermano, somos parte… No somos un programa de chimentos que en un espacio critica Gran Hermano. Entonces con sentido común nosotros lo miramos desde adentro. Después, las críticas, les tocarán a otros programas… Se encaró como un programa que es parte de Gran Hermano, sino poníamos cualquier cosa atrás y no teníamos la facilidad de las imágenes ni la información que nos manda Telefé. Yo puedo discrepar con lo que veo, yo puedo decir ‘esto que hizo Gran Hermano no me gustó’ pero dentro de lo que es el reality. Yo creo que no está bien que me ponga a cuestionar el funcionamiento del reality o cuestionarme a mí mismo si está todo preparado, o si hay guiones, que no los hay… De alguna manera somos parte, y por eso me parece que no corresponde ponermelo a cuestionar.

- ¿Pero hay aspectos del programa que no les gusten?

L: No, porque todo está estudiado como para que hayan roces, como para que hayan equívocos… La forma que duermen, la forma que comen, la forma que compran la comida… Está hecho para que hayan determinadas situaciones…

- ¿No roza lo sádico a veces?

L: Por supuesto que sí. Roza lo sádico por cómo está armado y por los participantes que entran. Roza lo sádico, lo bizarro y lo ridículo. Se dice que las cámaras ocultas que hacía Tinelli tenían éxito porque al televidente le producía vergüenza ajena, y eso atrae… Decís ‘ah mirá pobre tipo’, y seguís mirando. Acá pasa lo mismo.

- Igual que te atraiga no significa que compartas ese contenido.

L: Obviamente que no. Si el día de mañana me decís ‘tenés doscientos millones de dólares, ¿harías un Gran Hermano?’. No., no creo. No es el estilo de programa que yo produciría. Porque además esto viene de muchos años y en todas partes del mundo hay un Gran Hermano, siempre que el presupuesto lo permita.

- ¿Acá no se podría hacer un uno?

L: No. Acá creo que ninguno de los canales está preparado como para hacer un Gran Hermano, y creo que el mercado uruguayo no daría como para financiarlo.

- ¿Y a nivel social creés que un Gran Hermano hecho acá sería visto con buenos ojos por la sociedad uruguaya?

L: Es tan rara la sociedad uruguaya… Por lo general aceptamos cosas de los argentinos que no aceptaríamos de un uruguayo. A mí me ha pasado… Si un uruguayo se acerca o roza algo que hacen los argentinos ya te caen con un palo: que estás imitando, que querés irte para allá, que sos tal cosa, que sos tal otra… Yo siempre digo que si Tinelli hubiera sido uruguayo duraba tres meses. Somos muy raros, no aceptamos nada nuestro…

- Una crítica que podría recibir este ciclo es que es un programa uruguayo basado en algo argentino, ¿cómo lo evalúan eso?

L: Si acá se critica todo… ¿Me va a llamar la atención que se critique eso?

E: Si es uruguayo es malo, si es argentino robamos la idea de allá, entonces nada les gusta…

L: Nosotros vamos por todo: Es uruguayo, malo,y copiado de allá (risas).

E: Ponemos todo y damos lo mejor que sabemos hacer para acercar Gran Hermano al público uruguayo.

- En tu caso Luis, has tenido un discurso bastante crítico con los programas argentinos que acaparan gran parte de la programación nacional...

L: Yo quiero que me muestren un tape de eso. Dicen que nadie resiste un archivo… Yo critiqué los programas argentinos tanto como los uruguayos.

- Sí, pero por ahí tu crítica fue hacia el consumo de los uruguayos de tantos productos argentinos, y la contradicción puede estar en que este ciclo fomenta ese consumo…

L: Yo quiero que me traigan un tape que diga eso. Lo que pude haber criticado es el producto como también critiqué a los uruguayos… ¿Pero es novedad que el uruguayo consuma lo argentino? No es novedad. Pasa con los artistas uruguayos. Te pongo un caso fresquito: Maxi De la Cruz hace veinte años que es un fenómeno, pero tuvo que ir a rendir examen con Pachano para que acá llene teatros. Estamos todos locos…Hubo una periodista uruguaya, que después de verlo en el Movie Center dijo ‘nunca vi en este país a un hombre que haga lo que hace Maxi con las caras’… Empezando por el padre, Petru, y así te puedo nombrar mil, pero como Pachano dijo que Maxi estaba bien, ahora todos dicen ‘ah, que bárbaro’. Eso sí lo critico.